Estamos
habituados a oír hablar de los “planes de prevención” (evacuación,
autoprotección, seguridad…) y en general de todos aquellos planes y medidas que,
los bomberos deseamos que se exijan a las empresas, organismos, administraciones,
o a cualquier actividad o zona de riesgo y que están encaminados a evitar
siniestros o a minimizar las consecuencias de estos.Algunos bomberos y Servicios,
exigimos a demás, participar en estos planes, o al menos opinar, cuando no
visarlos y controlarlos. Incluso existen Cuerpos de Bomberos que de forma
general y sistemática llevan la voz cantante en estas cuestiones, a través de
Departamentos de Prevención competentes.
También es común el empleo del término”plan de intervención” al hablar de dirección y
control de siniestros, para referirnos a las decisiones tácticas del mando conducentes
a neutralizar un siniestro concreto durante su curso.
En
otro orden de cosas, también nos suenan los planes de “protección civil”,
planes marco de carácter genérico y que fundamentalmente tratan (no siempre lo
consiguen) de ordenar competencias y responsabilidades.
Lo
que ya es poco frecuente en España es hablar de Pre-planes de Intervención
(preplanning). En este caso, es el Cuerpo de Bomberos el que toma la iniciativa
y la empresa, organización, administración,…, afectada, la que colabora con
nosotros.
Si
los planes de prevención pretenden evitar que el siniestro suceda, o minimizar
sus efectos, el Pre-plan da por hecho que el siniestro va a ocurrir y nos adelantamos
al mismo estableciendo pautas organizativas previas, desde el punto de vista
estratégico y táctico, a diferencia del plan de intervención que se elabora
en el mismo momento en que se produce la intervención y tiene un carácter
dinámico.
En
resumidas cuentas, el Pre-plan es un Procedimiento
Operativo personalizado para una instalación, zona, actividad y en general
para un riesgo concreto.
Obviamente
no pueden hacerse pre-planes de todo, para eso están los Procedimientos Operativos
generales del Servicio. Es necesario “parcelar” el territorio y en la zona de
influencia de cada Parque (1ª alarma) escoger aquellos riesgos singulares que
pretendemos cubrir con un pre-plan.
Pre-planes
se pueden hacer de industrias, edificios singulares (por su altura,
dimensiones, usos…) túneles largos, masas forestales, zonas inundables y en
general todos aquellos riesgos que tengan una posibilidad alta de evolucionar a
catástrofe.
Dado
que son planes personalizados, es difícil establecer pautas de elaboración
fijas, pero apoyándome en dos experiencias personales (Pre-plan de intervención
en los túneles de Guadarrama y Pre-plan de incendio en el Colegio Alfonso XII
del Monasterio de El Escorial), trataré de fijar algunos criterios que a mí me
han servido.